¿Por qué deberías estudiar música en el 2024?
Según un estudio realizado por la Federación Internacional de la Industria Fonográfica en el 2021, las personas escuchan más de 18 horas de música a la semana. Y es que sin dudas es un gran acompañante en diferentes momentos de la vida, desde sesiones de estudio previo a un examen hasta en un momento de ocio animando las discotecas los fines de semana. Mas allá de eso, ¿Por qué no tomar un rol activo y estudiar música? ¿Cuál serían los beneficios?
Desarrolla tu creatividad
En la mayoría de las ocasiones los aficionados a la música se limitan a reproducir canciones de sus artistas favoritos y que son ajenos a su ellos. Ya sea que decidas tocar algún instrumento o cantar, en la práctica es común que mejores tu oído musical, el entendimiento de las formas musicales y estimules tu imaginación para trasladarlo a melodías de tu propia autoría.
De ese modo, a medida que avances en el estudio de la música, podrás desarrollar y aplicar la creatividad en distintos ámbitos de tu vida.
Mejora la memoria
Un estudio de la
Universidad de Ginebra, la
Escuela Politécnica Federal de Lausana y la
HES-SO de Ginebra, reveló que el estudio de
la música promueve la neuroplasticidad a partir del incremento de la materia gris, arrojando adicionalmente resultados positivos para la memoria de trabajo1. Cabe destacar que los participantes de dicha investigación eran jubilados que nunca habían tocado un instrumento, y en apenas 6 meses se pudieron ver resultados positivos.
¿Cómo es esto posible? Pues, así como los atletas entrenan sus cuerpos con pesadas mancuernas, una de las formas que el cerebro tiene para mejorar su estado es a través de la música.
Alivia la ansiedad y depresión
Los trastornos mentales son inconvenientes que se presentan con mayor frecuencia en la vida de las personas, quienes a menudo recurren a la medicina como solución para aliviar los síntomas. Sin embargo, la música se presenta como
una excelente alternativa natural para que puedas expresar tus emociones y logres alcanzar un bienestar general luego de cada práctica2.
Y es que cuando cantas o tocas una guitarra, lo único que puedes hacer es estar enfocado en el presente y poner atención a las melodías que quieres exponer. Funciona como un liberador de la tensión que se puede acumular en la vida cotidiana, tal y como pasa cuando haces ejercicio físico.
Mejora la calidad de sueño
Según un estudio realizado por el
Hospital Universitario Royal Devon y Exeter, con el canto de ciertas palabras onomatopéyicas
una persona puede disminuir su nivel de ronquido3, traduciéndose en un sueño reparador en sus parejas. Además, como en cada clase que tomes de canto o instrumentos le dedicaras una gran concentración y energía, provocaras un cansancio físico y mental que luego se reflejará en tener un mejor sueño por la noche.
Concéntrate con facilidad
Una consecuencia de estudiar música, es que tu nivel de concentración a la hora de hacer una actividad se verá mejorada notoriamente. ¿Por qué sucedes esto? Al tocar el piano, por ejemplo, requerirás de poner atención a cada tecla que presiones mientras tratas de que suene justo como la melodía que tienes pensada. Diversos estudios afirman que
la música estimula zonas del lóbulo prefrontal4, y son ellas justamente las que están relacionadas con la
capacidad de atención de una persona.
La relación entre la música y el ACV
Según la Organización Mundial de la Salud, aproximadamente
15 millones de personas sufren un accidente cerebrovascular a cada año5, siendo la recuperación muy importante para brindarle a esas personas la mejor calidad de vida posible. La dificultad del habla suele ser una secuela, por lo que
el canto acompañado por un terapeuta musical es una herramienta que funciona para revertir esa situación6.
Los beneficios de cantar
Los estudiantes de canto deben aprender a
respirar correctamente realizando ejercicios para fortalecer el diafragma7, lo cual, una vez logrado, se traduce en una mayor relajación a lo largo del día. Además, mejora las habilidades sociales de la persona al prepararla para hablar en público y ejercitar los pequeños músculos involucrados en la voz.
Gana dinero con lo que te gusta
Mas allá del ámbito de la salud, puedes mejorar tus finanzas cuando logras dominar un instrumento y te sientes listo para enseñárselo a otras personas. Si bien existen carreras universitarias específicas para personas interesadas en la educación, puedes convertirte en un profesor particular para aquellos interesados en tu instrumento. Puedes brindar clases en institutos privados, en el domicilio del alumno o en tu propia casa, para que de esa forma puedas monetizar tu conocimiento.
Mas allá de las clases presenciales, puedes ser parte de diversas plataformas de freelancers y enseñar tus conocimientos de manera remota, contactando con alumnos de distintos países. Existen decenas de personas interesadas en aprender a cantar opera, tocar la armónica o un solo de guitarra de su banda de rock preferida.
Socializa con otros
En un mundo cada vez más inmerso en las redes sociales, las plataformas de entretenimiento y videojuegos, es observable que a medida que pasan los años las personas parecen alejarse una de otras. Cuando estudias música, te veras interesado en reunirte con otros que estén en tu misma situación para seguir aprendiendo o formar una propia banda.
En ese último caso, es común que se hagan grandes amistades con gente que jamás hubieras imaginado. Adicionalmente, si decides estudiar por tu cuenta, a medida que avances verás como la percepción de ti mismo va a ir cambiando, ya que poco a poco serás capaz de tocar instrumentos que te parecían ultra difíciles, o de llegar a cantar tonalidades que antes solo soñabas. Todo esto se traduce en una clara mejora en tu autoestima y tu capacidad para relacionarte con otros.
Mantente productivo
Frecuentemente una persona al llegar a su casa de trabajar, tiende a relajarse mirando la televisión o jugar videojuegos en una consola, ignorando que puede haber actividades incluso más satisfactorias por hacer. Aprendiendo música invertirás tu tiempo libre de manera productiva, estando enfocado en tu propio mundo mientras tocas tu instrumento favorito y cantas esa canción que quieres aprender para darle una sorpresa a tus amigos.
Javier Aguirre
Grado Profesional de Música